EL MODERNO v2. #CASAGUZMAN
Hace un algún tiempo inauguramos una nueva sección en redes sociales que titulamos: «El Moderno»; y que dedicamos a conocer obras de Arquitectura Moderna a lo largo de todo el mundo. Pero de la de verdad, de la buena. Pretendemos tratar en esta sección obras y proyectos singulares por su concepción novedosa, por su capacidad de interpretar la tradición y la historia y traerla al presente, por suponer una nueva forma de hacer Arquitectura.
En casa también tuvimos el siglo pasado grandes Maestros de la Arquitectura, aquí también tuvimos ejemplos de Arquitectura Moderna de calidad. Por eso hoy traemos la segunda edición de esta sección, con una obra en España; desgraciadamente desaparecida: La Casa Guzmán, diseñada por Alejandro de la Sota.
 
															Alejandro de la Sota recibe un encargo particular: diseñar una casa de campo para esta familia, proyectar una vivienda para sus períodos de vacaciones. Y para ello traen una parcela de grandes dimensiones en las afueras de Madrid, en una zona de altura que domina el curso del Río Jarama y su paisaje.
La propuesta del arquitecto es una casa radical y moderna para su contexto: España en 1.972. Ubica la vivienda en la zona predominante de la parcela para dominar con ella el espacio exterior del jardín y todo el paisaje sobre el río que discurre debajo. La casa adopta un perfil bajo y queda semienterrada en el terreno, de forma que configura así el horizonte de la parcela. Con esta operación innovadora se origina un campo terraplenado que permite introducir los espacios libres dentro de la vivienda a través de sus terrazas exteriores.
 
															Para aprovechar el buen clima en la época estival se dispone la zona de estar abierta al exterior y protegida a la misma vez con una amplia terraza. Estas terrazas a distintas alturas se entrelazan para dejar pasar el jardín y que éste atraviese la casa.
En esta casa, se experimenta con una arquitectura aparentemente invisible, que no establece límites entre el interior y el exterior; mas bien los diluye con terrazas y espacios cubiertos que se abren totalmente al jardín y el paisaje.
 
															“Lo bueno de hoy en día es que podemos hacer una casa abierta que se cierre ; parece que es una tontería, pero es así, esa es la gran novedad. Estar dentro de tu casa y que en ella penetre el jardín, que no pises una raya al pasar de dentro afuera”
– Alejandro de la Sota –
 
															El interior de la casa se diseña pensando en la relación con el jardín y el paisaje que el arquitecto persigue como criterio rector del proyecto. Puertas y ventanales acristalados abren los espacios interiores a las terrazas exteriores, que sirven de zonas sombreadas de tránsito hacia el jardín.
Esta casa es un lujo, ¿no cree?
Fotografía: Fundación Alejandro de la Sota, Laura Rivas Olmo y Pablo Tomé Ferreiro.
 
															
